lunes, 19 de septiembre de 2022

Reloj de arena

Volví a despertar cubierta por la capa de dilatada tristeza,

Melancólico vacío y demanda de solitud adherida a mi piel,

vacilando si este es el mañana que deseo

y el tiempo escapa a través del reloj de arena.


Nostalgia de un pasado reciente que atormenta con memorias

de lo que pudo haber sido, fue, y desertó.


Se emponzoñó el amor y la vehemencia

se vulgarizó la avidez y la pasión.

El deseo se tornó desidia, inapetencia,

y la conquista y disposición se aburguesó


Sucesión de hábitos y rutina insípida

que ni me colman ni me recargan,

y las heridas que no cicatrizan

postergadas con insustanciales vendajes de anhelo.


Y la a espera de restaurar lo que se vició

si es posible recuperar lo malgastado...


Mi mente que no da holgura, demanda,

inconformista y codiciosa, arde,

mi alma que suplica clemencia y calma,

serenando el vacío de erotismo y de cama.


1 comentario:

  1. Volverás un día de tormenta
    como una raíz medicinal,
    dormiré a la sombra de tu cuerpo
    moldearemos un jardín
    emergerá de tus senos
    con silentes espasmos
    ahuyando al firmamento;
    nos detendremos como la tierra
    y echaré raíces en tus labios
    se estremecerán los guardianes
    cuando crepiten rojos
    hasta que deje de llover.

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