sábado, 3 de octubre de 2020

Insurrección

 

No puedo arraigarme donde no deseo

ni medrar en muros de ineptitud.


Inhabilitada para el uso de antifaces

y fraudes del verbo,

me resisto a farsantes ánimas que acechan

atrincherada en bastiones de certeza.


No debo combatir ni erosionarme

por roces sin posteridad,

yo soy agua, fluyendo incesante

entre angostas rocas, hacia el mar.


Párvula y natural, ella habita en mi

creciendo entre risas y alborozo,

previniendo sagaz desde su candor,

hasta que en mis ojos habiten las nubes.


Para mi amiga...



No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.